Una nueva ley aprobada en Francia ha puesto fin a la práctica de los influencers de promover cirugías estéticas y dietas mágicas en sus contenidos diarios. Esta medida, categorizada como “intrusismo médico”, busca proteger a la población de consejos y recomendaciones que provienen de personas sin el conocimiento ni la experiencia necesaria.
A partir de ahora, aquellos creadores de contenido que no acaten esta norma podrían enfrentar multas de hasta 300.000 euros o incluso penas de hasta dos años de prisión. Las autoridades francesas buscan establecer límites claros y responsabilizar a aquellos que puedan influir negativamente en la salud y bienestar de los seguidores.
Esta determinación refuerza la importancia de contar con información confiable y respaldada por profesionales en el ámbito de la salud. Francia se suma a otros países que buscan regular las prácticas de los influencers y garantizar que los mensajes promovidos en las plataformas digitales sean seguros y éticos.
Con esta nueva ley, se espera que los influencers se concienticen sobre la responsabilidad que tienen en la sociedad y el impacto que pueden tener en la vida de sus seguidores. La protección de la salud y el bienestar de la población se convierte en una prioridad, y Francia da un paso importante en la regulación de la industria del contenido digital.